Twittear
A pesar de que los dados están cargados y las cartas están marcadas, el Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) busca la transformación de México y sus instituciones por la vía pacífica-electoral y no hay otra opción, afirmó Andrés Manuel López Obrador.
En el Congreso estatal de MORENA en esta entidad, subrayó que el Movimiento ha sido, es y será pacífico y no busca el cambio por la vía armada.
Ante el diputado federal Martí Batres y el senador Alejandro Encinas, explicó que, más allá de los fraudes electorales de 2006 y 2012 y aquellas voces que estiman que no tiene caso participar en las contiendas si siempre se atropella la voluntad ciudadana expresada en las urnas, MORENA transitará por la vía pacífica y electoral.
Sin embargo, aclaró que el Movimiento no está obligado a reconocer ni a aceptar resultados fraudulentos. Después del fraude de julio pasado, pedían que reconociera el aparente triunfo del priista Enrique Peña, pero así como la mafia del poder está empeñada en imponer a un pelele, “nosotros estamos empeñados en luchar hasta abolir el régimen de corrupción”, detalló.
En la lucha por la transformación del país no habrá tregua ni ventaja alguna, enfatizó al asegurar que MORENA está al servicio de los intereses del pueblo y de la nación y no de sus dirigentes.
Para despejar dudas, manifestó que en el Movimiento no habrá afiliación masiva ni se dirá: ¡Vengan todos!, tampoco “vamos a quitarle militantes” a los partidos políticos progresistas, en caso de que MORENA se convierta en instituto político.
A diferencia de las agrupaciones políticas, adelantó que no se aceptará a aquellos ciudadanos que expresen que representan o los respaldan 500 militantes, porque “no queremos ciudadanos imaginarios, sino conscientes y reales.
Acompañado por el representante de MORENA en el estado Sinhué Piedragil, el ex candidato presidencial puntualizó que cada hombre y mujer que ocupe un cargo en la organización tendrá que trabajar en labores de concientización.
Al informar que se realizarán 32 asambleas estatales, con una asistencia de tres mil ciudadanos en cada una de ellas, salvo aquella que se realizará en el Distrito Federal, en donde se estima una participación de 100 mil ciudadanos, para acreditar uno de los requisitos que establece la legislación electoral para aquellas agrupaciones que pretenden obtener el registro como partido político, mencionó que el próximo 1 de diciembre se llevarán a cabo mítines en las capitales del país, en contra de la imposición de Peña como presidente del país.
En entrevista previa al evento, López Obrador afirmó que las reformas energética y fiscal que promueve Peña corresponden a una orden que le dio Carlos Salinas de Gortari y los integrantes de la mafia del poder.
“Peña es un empleado de Salinas, como lo fue Calderón; ahora ya nadie habla de Calderón. ¿Qué se hizo Calderón? Ahora entra otro empleado de la mafia del poder, del grupo que controla Salinas, que es el que manda en México”, abundó.
Ese grupo –aseguró— “está tramando aumentar los impuestos, aumentar el IVA, del 16 al 22 por ciento, porque quieren de esa manera obtener ingresos que se van a dejar de recibir con la entrega del petróleo a extranjeros, ese es un plan perverso”.
La reforma fiscal pretende aumentar impuestos, que la gente pague más contribuciones y, con ello, “tapar el hueco que va a dejar el hecho de la entrega del petróleo a extranjeros, porque los extranjeros no van a pagar impuestos, se van a llevar la renta petrolera, entonces esa es la maniobra que quieren hacer, pero yo creo que no van a lograrlo”.
En ese plan “Peñita” juega el rol de vendedor del petróleo, que no de su propiedad. “El petróleo no es del gobierno, el petróleo es de la nación, es del pueblo de México, y además no solo es de nuestra generación, es de los que vienen detrás de nosotros, de los que están por llegar, de los que están por nacer, es una herencia que tenemos que cuidar, para que no se malgaste esa herencia y se entreguen buenas cuentas a las nuevas generaciones”, explicó.
En contraste con las voces que se manifiestan a favor de la posible privatización del petróleo, López Obrador dijo estar en contra porque la entrega de bienes de la nación a particulares es sinónimo de corrupción y para beneficio de una minoría rapaz.
Desde que inició el periodo de desincorporación de empresas públicas y que se acrecentó en el salinato, “no hay privatización alguna que haya beneficiado a México; si saben de alguna, me avisan. Entonces, lo que quieren es apropiarse de lo que es propiedad de los mexicanos”, señaló.
Como ocurrió en el pasado –prosiguió—“quieren apropiarse las compañías extranjeras del petróleo, con la colaboración de estos traidorzuelos que mal gobiernan al país”.
Con relación al recurso que se interpuso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para evitar que se destruyan las boletas electorales de la elección presidencial de 2006, expresó su acuerdo.
La autoridad electoral no tiene motivo alguno para destruir o quemar las papeletas, manifestó al proponer que los paquetes electorales pasen a propiedad del Archivo General de la Nación y que toda la documentación esté a disposición de los historiadores y ciudadanos interesados en realizar un recuento de los votos, porque “Calderón no ganó la elección presidencial, como tampoco Peña ganó ahora; son dos fraudes al hilo”.
López Obrador participará mañana del Congreso estatal de MORENA en Aguascalientes.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario