Escaso en propuestas concretas el debate entre los tres precandidatos panistas

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Ayer en un debate que careció de propuestas concretas para resolver los principales problemas que enfrenta el país, participaron los tres precandidatos presidenciales del Partido Acción Nacional (PAN) para los comicios del 1 de julio del 2012

En el debate, transmitido por el PAN en su sitio de internet y por dos canales de televisión por cable, participaron los precandidatos Josefina Vázquez Mota, Ernesto Cordero y Santiago Creel.
Las encuestas sitúan a Vázquez Mota con una amplia ventaja sobre sus dos rivales. La elección interna será resuelta en una primera vuelta que se desarrollará el próximo domingo y, si no hay un ganador claro, en una segunda ronda convocada para el 19 de febrero.

Con un formato muy rígido y con réplicas ordenadas, el debate político se convirtió con frecuencia en un diálogo de sordos, ya que los aspirantes aprovecharon la oportunidad para exponer sus ideas y apenas dedicaron tiempo para comentar las de sus rivales.

Vázquez Mota, a quien el diario Reforma daba hoy un 65 por ciento de las preferencias entre los militantes y adherentes del PAN, presentó algunas propuestas concretas, entre ellas la cadena perpetua “para los políticos que pacten con el crimen organizado”.También propuso ampliar el número de becas estudiantiles y una reforma laboral para incorporar a la economía formal cada año a 400,000 personas.

Cordero, exsecretario de Hacienda, defendió principalmente su trayectoria en el Gobierno del actual mandatario, Felipe Calderón, y dijo que había demostrado “resultados probados en la conducción económica del país”.

Creel, por su parte, que en 2005 compitió con Calderón por la candidatura presidencial del PAN, insistió en la necesidad de resolver el problema de la inseguridad en México, porque, agregó, “si no hay seguridad no hay un ambiente de inversión”.

No hubo propuestas concretas, sin embargo, sobre el principal drama que atraviesa México, vinculado con la violencia generada por los grupos de narcotraficantes y del crimen organizado, que ha causado unos 50,000 muertos durante la gestión de Calderón.

Al respecto, Vázquez Mota anunció que las Fuerzas Armadas, que participan en esta lucha, sólo regresarán a los cuarteles cuando haya “policías confiables”, una propuesta que defienden también Calderón y el Partido Revolucionario Institucional (PRI).

El único conato ríspido se produjo entre Cordero y Vázquez Mota, ya que el primero acusó a la segunda de faltar a la mayoría de las sesiones del Parlamento en la última legislatura, cuando llegó a ser jefa del grupo parlamentario del PAN.

Vázquez Mota aseguró que había asistido a la mayoría de las sesiones, leyó palabras de Calderón en la que ensalzaba su labor en el Parlamento y, cuando Cordero insistió en el tema, lo ignoró.

En los comicios del 1 de julio ya han confirmado su participación el aspirante del PRI, Enrique Peña Nieto, y el representante de una coalición de izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, por lo que aún queda por definir quién representará al PAN.